BOLETIN GUEMESIANO Nº 133
MAYO
DE 2011
PRESENTACIÓN
El Lic. Leo Ibacache
dedicó un interesante artículo al Grl. Güemes, cuya primera parte se
trascribe en la presente edición. El autor comenta que le costó bastante
encontrar información fidedigna respecto a la gesta encabezada por el
héroe, sus estrategias militares, su accionar, su vida e incluso sobre
sus tropas, tan envidiadas por los españoles. Ibacache considera a
Güemes uno de los próceres más importantes de Argentina y Latinoamérica,
así como uno de los generales más importantes en la historia mundial,
lamentando lo poco que se sabe de él.
Seguidamente se
transcribe parte del prólogo de un libro de reciente edición, en el que
se analizan los nombres del héroe y el árbol a cuyo amparo expiró;
fragmentos de un artículo en el que un investigador justifica la
necesidad de re escribir la historia, finalizando con novedades
Güemesianas, la agenda desarrollada en Abril y el correo de lectores.
CONTENIDO
I.
EL
GRAL. MARTIN MIGUEL DE GUEMES Y LA GUERRA DE GUERRILLAS (PARTE I) por el
Lic. Leonardo Ibacache
II.
GUEMES, LOS NOMBRES Y EL MITO, por Mariano Cornejo
III.
LA
NECESIDAD DE RE ESCRIBIR LA HISTORIA, por Luis Grenni
IV.
NOVEDADES
V.
CORREO DE LECTORES
VI.
AGENDA GUEMESIANA ABRIL DE 2011
VII.
PALABRAS FINALES
DESARROLLO
I.
EL GRL MARTIN MIGUEL DE GUEMES Y LA GUERRA DE GUERRILLAS
(PRIMERA PARTE)
Leonardo N. Ibacache,
Licenciado
en Administración, Analista en Marketing, estudiante avanzado de la
licenciatura en Sociología y Docente universitario, es autor de un
interesante trabajo sobre Estrategias en los Negocios donde analiza la
actuación militar del Grl Martín Miguel de Güemes. Seguidamente se
expone la primera parte de dicho artículo.
Presentación
En la
primera parte de “Estrategia en los negocios” se definió brevemente la
concepción de estrategia y sus antiguos orígenes militares bélicos.
Además se citaron a los exponentes más reconocidos en los ámbitos
académicos e intelectuales, autores de las dos obras más significativas
y más antiguas pero dotadas de una inmensa vigencia: “El arte de la
guerra” de Sun Tzu (chino, vivió 500 a.C.,) y “Sobre la guerra” de Karl
Von Clausewitz (Prusiano, 1780 - 1831).
En la
segunda parte se analizó estratégicamente “la campaña Libertadora del
General San Martín”, sucedida entre los años 1.814 y 1.821. Colmada de
intensos y disimiles aciertos y desventuras desde un punto de vista
histórico pero además con la intención de que posea un fin didáctico, es
decir, humildemente de demostrar (o al menos tratar) que es posible
fusionar nuestra historia con teorías de administración desde sus
autores más reconocidos.
En
este tercer artículo y siguiendo la lógica del artículo anterior nos
referiremos al denominado: “Marketing de guerra” tratando de
relacionarlo con las estrategias de “guerra de guerrillas” exitosamente
implementada por el General patriota salteño Martín Miguel de Güemes
contemporáneo del General San Martín y uno de sus mayores aliados en la
lucha independentista.
Introducción
Tanto
San Martín como Güemes compartían la idea de la complejidad y lo
arriesgado que era el plan de acción consistente en llegar a Lima a
través del Alto Perú en oposición con las ideas del General José Rondeau
(designado por el gobierno de Buenos Aires en mayo de 1814 para
reemplazar a San Martín en el Ejército del Norte), aunque, tras
desastrosas derrotas (principalmente la de Sipe – Sipe en 1815) debió
dirimir de su cargo y entonces la defensa de los límites del Norte
septentrional argentino (Salta y Jujuy) con el Alto Perú (Actual
Bolivia) quedó definitivamente en manos de Güemes y sus gauchos.
En lo
que respecta a las empresas, tal como lo expresa Lambin: “En las
economías industrializadas, las situaciones de oligopolio son frecuentes
y en numerosos sectores industriales las empresas se enfrentan con
productos escasamente diferenciados en mercados estancados y saturados,
donde la ganancia de uno supone necesariamente la pérdida del otro. En
este tipo de situación, contrarrestar las acciones de la competencia se
convierte en un factor clave de éxito. Este clima favorece evidentemente
la adopción de un Marketing de combate que pone en el centro de sus
preocupaciones la destrucción del adversario. Kotler y Singh (1981),
Ries y Trout (1986), Durö y Sanstrom (1988) han activado la analogía con
la estrategia militar y han propuesto tipologías de las estrategias
competitivas que se inspiran directamente en los trabajos de Von
Clausewitz (1908)” (Lambin, 1997: 297-298).
El
General Güemes
Para
comprender mejor la dimensión de la figura del General Güemes y sus
gauchos se puede analizar el siguiente fragmento: “Durante nueve años,
entre 1812 y 1821, la caballería gaucha, una de las mejores del mundo,
venció sucesivamente, en una desgastadora guerra, ocho invasiones
llevadas a cabo por las tropas realistas, procedentes del Alto Perú y
Perú”
Fuerzas Irregulares
Bartolomé Mitre en su obra sobre la Historia de Belgrano cita al General
español García Camba quien de esta manera describe a los gauchos: “Los
gauchos eran hombres de campo, bien montados y armados todos de machete
o sable, fusil o rifle (carabina de caballería), de los que se servían
alternativamente sobre sus caballos con sorprendente habilidad,
acercándose a las tropas con tal confianza, soltura y sangre fría que
admiraban a los militares europeos, que por primera vez observaban
aquellos hombres extraordinarios a caballo, y cuyas excelentes
disposiciones para la guerra de guerrillas y sorpresa tuvieron repetidas
ocasiones de comprobar. Eran individualmente valientes, tan diestros a
caballo que igualan si no exceden, a cuanto se dice de los célebres
mamelucos y de los famosos cosacos, porque una de las armas de estos
enemigos consistía en su facilidad para dispersarse y volver de nuevo al
ataque, manteniendo a veces desde sus caballos y otras veces echando pie
a tierra y cubriéndose con ellos, un fuego semejante al de una buena
infantería.”
Armamento de “los Gauchos”
Las
armas eran escasas y las disponibles se empleaban en los ejércitos
regulares, por lo tanto los milicianos disponían de armas de fuego
anticuadas y en número reducido. Las principales armas del “criollo
miliciano”, eran las lanzas de fabricación casera, el cuchillo, las
boleadoras y el lazo, además de las que le quitaban al enemigo.
El
Coronel Best detalla el uso de las armas que poseía el miliciano: “La
lanza era improvisada con un cuchillo o media tijera de esquilar, que
ataban con tientos, etc, a una caña tacuara o vara de palma. El cuchillo
es arma de entrevero y, en la persecución, medio de terminar con el
jinete caído por bolazo, boleado, etc., degollándolo. Lejos del enemigo,
las boleadoras eran llevadas en la parte delantera del recado sujetas
por tientos; a su proximidad, en la cintura del jinete. El lazo –de seis
a ocho metros de largo- servía a la tropa para cuartear en pasos
difíciles a los vehículos, tomar el ganado, especialmente el chúcaro, y
aún enlazar al enemigo y arrastrarlo. La lanza, aparte de arma muy
importante, era elemento muy útil para tomar la profundidad en los
cursos de agua y en las aguas estancadas, lo mismo que para conocer las
condiciones de su
piso; sirve también para
improvisar medios de protección contra el sol, la lluvia, y otras
inclemencias clavando varias y colocándoles ponchos, cueros sobados,
etc. que lleva consigo el jinete; también se pueden preparar con ellas
elementos flotantes, uniéndolas y cubriéndolas con cueros, etc. para
pasar armas, equipo y otras cosas sobre el agua.”
En las
fuerzas irregulares tiene un papel fundamental el caballo, pues de él
dependía la sorpresa, el ataque, la persecución y la retirada. Al Ries y
Jack Trout en su libro: “La guerra del marketing” nos proponen tres
principios para ser implementados en una “guerra de guerrillas” de los
negocios:
Encontrar un segmento en el mercado lo suficientemente pequeño para
defenderlo.
No
importa cuán exitoso se llegue a ser, no hay que actuar nunca como el
líder.
Estar
preparados para retirarse apresuradamente ante una noticia de último
momento. (Ries y Trout, 2006; 103-109)”.
En la edición de Junio se expondrá la segunda y última parte del
artículo, el que puede ser leído en:
http://administraciondesdeelsur.blogspot.com/2011/04/el-general-martin-miguel-de-guemes-y-la.html
II.
GUEMES, LOS NOMBRES Y EL MITO
En el
prólogo de “Espíritus en el paisaje. El psicoanálisis de Güemes” de Juan
Ahuerma Salazar, dice Mariano Cornejo:
“De
los múltiples hilos que nos vinculan al pasado es fundamental el del
idioma, y dentro del idioma, secretamente está el nombre de cada uno:
Güemes es una palabra de raro origen; seguramente español. Si la palabra
Güemes tiene, como es probable, una raíz latina, tendríamos que irnos
entonces al antiguo almácigo del griego. Entonces, para ir a la raíz de
la palabra Güemes debemos obviar las vocales (éstas aliteran, saltan, se
intercambian) y quedarnos con las brutas e inamovibles consonantes.
Tenemos entonces la Gama inicial (G), la Ypsilon (U francesa con sonido
del i cerrado, en este caso no consonante pero vocal fuerte en función
de la Gama anterior y, asociada a ella, la E que le sigue y la Mi (M).
Estamos, entonces, frente a la raíz Gym, que en griego encabeza una
extensa familia de palabras vinculadas al ejercicio del cuerpo y la
guerra: la gimnasia, la ejercitación, la lucha, la agilidad. El guimnes
era el soldado armado a la ligera, el jinete libre, cierta infantería
ligera. También la raíz en cuestión define la desnudez, el ir desarmado,
descubierto, despojado. La misma palabra jinete tiene implícita la raíz
Gym.
Además, si de nombre se trata, no podemos obviar que en Martín está
Marte, dios de la guerra, y que Miguel es el nombre del arcángel
caballeresco y militar que asume el papel de centinela, motivo por lo
cual, desde antiguo, sus altares se ubicaban en los sitios más altos
como las cumbres de los montes o en las torres de las iglesias, y que se
lo representa, la mayoría de las veces, a caballo, armado de lanza,
espada y escudo en la tarea de matar al dragón”.
Más
adelante, Cornejo realiza un importante aporte relacionado con la muerte
del héroe: “Güemes no muere debajo de un sauce, una morera, bajo de
un algarrobo –árbol entre los árboles en estas tierras del norte- ni
bajo un yuchán, un molle o un lapacho. El mito sabe elegir sus
escenarios y el árbol que cubre su muerte será un cebil. Pero resulta
que el cebil era objeto de peregrinaciones indígenas desde antiguo.
Donde crecía un cebil se encontraban fuerzas de otro orden y los
chamanes sabían el efecto de las semillas de sus bayas que conectaban al
que las consumía con el poderío del tigre, con las alturas de los
cóndores o con lo letal de las serpientes”. Los párrafos
transcriptos encierran verdades y belleza, propios de un profundo
análisis sobre el prócer que contribuye a la comprensión del porqué de
su vigencia. (El título original del escrito es “A modo de prólogo: Una
carta”).
III.
LA NECESIDAD DE RE ESCRIBIR LA HISTORIA
En el
Prólogo de “Primera Expedición al Alto Perú” dice Luis Grenni:
“Cuando se considera el Bicentenario de la Revolución
por la Independencia, a la luz de la historia, debería tenerse en cuenta
a la región que conformaba la Gobernación de Salta del Tucumán y el Alto
Perú, que al momento de la emancipación de sus pueblos tuvieron una
actuación primaria y decisiva en una guerra continua de 1810 a 1825. Por
tal razón es que debiera considerarse como la “Década Bicentenaria de la
Revolución por la Independencia”.
Mientras en Buenos Aires se derrocó a un Virrey sin fuerza, con un
debilitado poder, sin que se disparara un solo tiro, en estas regiones
hubo 15 años de luchas sangrientas. Allí estuvo el foco revolucionario
en 1810, pero no fue el único; que si bien iniciaba un proceso
libertario; en esta regiones se consolidaba el independentista,
sufriendo las más dramáticas consecuencias con brutales represiones, en
una epopeya sin par; ya que Jujuy en el momento de la revolución por la
independencia era el centro territorial y no su extremo marginal como es
hoy
Sin
embargo y a pesar de ello, los intereses del Puerto de Buenos Aires,
adueñándose de la historia, la transformaron con una historiografía en
la que prefabricaron a su medida una historia mitológica, que colocada
en los planos de una “enseñanza oficial” desvirtuaron con la voz de los
claustros y sus superhéroes, los valores fundamentales que hacen a la
esencia de nuestra tradición y en ella, nuestra cultura, haciéndonos
asumir una pseudo cultura europeizante, funcional a sus intereses, con
lo que pasamos de un régimen colonial a otro.
Nuestra verdadera historia es casi desconocida en los programas
oficiales de la enseñanza, siendo la gran ausente; es necesario
revisarla, redescubrirla, y sobre todo “re escribirla” y este es el
nuevo desafío para encontrar el camino de nuestra verdadera identidad,
todo está documentado, al alcance de nuestras manos y en el recuerdo de
nuestros abuelos, los hechos se sucedieron hace solo doscientos años y
corresponden a la historia y no a la mitología”,
expresa
el investigador.
IV.
NOVEDADES
·
Recientemente fue presentado en Salta y en la Feria
Internacional del Libro la obra “Efemérides de Salta” publicado por el
Ministerio de Educación de esa Provincia. El mismo, cuidadosa y
esmeradamente elaborado por la Prof. María Eugenia Carante, reseña
fechas trascendentales de la historia y la cultura salteña.
Entre las
fuentes bibliográficas consultadas figura la obra: “Un salteño para la
Patria. El Grl. Martín Miguel de Güemes” publicado por el Diario El
Tribuno el 17 de Junio de 2010, cuya autora es la Prof. María Cristina
Fernández. La Prof. Carante obsequió un ejemplar de las Efemérides.
·
Según lo anunció el Dr. Sergio Etchart, Delegado del
Gobierno de Salta, la evocación del 190º aniversario del paso a la
gloria inmortal del Grl. Martín Miguel Juan de Mata Güemes se realizará
en la Ciudad de Buenos Aires los días 24 y 25 de Junio. El Programa de
actos será difundido en Junio.
·
El 18 de mayo, gauchos salteños integrantes de la Marcha
Patriótica de Homenaje Permanente al Grl. Martín Miguel de Güemes “Salta
de Pie” participarán en Canelones, República Oriental del Uruguay, de la
evocación del Bicentenario de la Batalla de las Piedras, la primera
librada en el marco de la lucha por la Independencia. Los dignos
representantes de la salteñidad son oriundos de Rosario de la Frontera,
La Candelaria, Metán y Anta.
V.
CORREO DE LECTORES
·
Desde
Córdoba, Carlos Di Fulvio, músico, compositor y autor de importantes
obras del cancionero argentino, felicitó la continuidad de la difusión
de la gesta Güemesiana, comentando lo expresado por el Dr. Luis Güemes
en relación con las contradicciones maquinadas por dividir para reinar.
Al respecto expresa que esto ha sido siempre “amén de separatista, el
motivo de investigación para la resurrección de los próceres en el canto
popular”. Di Fulvio es autor de “Canto Monumento” magnífica obra
dedicada a la memoria del Grl José María Paz.
·
Desde
Salta, Eduardo Dávalos Rivero expresa que “es un agrado recibir tan
importante Boletín que remonta a las épocas más brillantes de la Gesta
Libertaria de nuestros pueblos y conocer más a Martín Güemes”.
Eduardo nació en Bolivia pero sus raíces originarias lo vinculan con los
Dávalos Vicentelo de Salta. Este lector comenta que:
“La ilustre familia
de José Benjamín Dávalos Molina, entre los que se encuentran Juan
Carlos, Jaime Dávalos y otros descendientes, tienen como raíz el
matrimonio de Toribio Dávalos y Javiera Molina (pariente de los Guemes).
Toribio Davalos, nació en Cochabamba y entre los años de 1810 y 1815,
sirvió a los grupos guerrilleros del Alto y Bajo Perú. En
1816 fue obligado
a emigrar a Salta donde
se alista
en el Ejercito Patriota de Güemes con el grado de Teniente
Coronel de Caballería de Línea y Comandante General de Guerrillas,
cargo que mantiene hasta 1821.
Por el
juicio que le sigue el padre de Javiera Molina, en
1819 el General
Belgrano lo sentencia por bigamia, con
5 años de destierro en los Patagones
con pérdida del
empleo y de los honores militares.
En
setiembre de 1821, sorpresivamente Toribio Dávalos (47 años), actúa
en los Ejércitos de San Martín en Campo de
Soco en
el Perú, al mando del General Las Heras, con el cargo de Comandante de
los Granaderos a Caballo.
En octubre de 1821
en Lima, San Martin lo designa Comandante Militar de la Provincia
Canta. En 1822, al instalarse el primer Congreso Constituyente
del Perú, Toribio Dávalos es designado, como diputado representando a la
Costa, junto a Cayetano Requena”.
Si algún lector puede aportar información que permita
profundizar la actividad militar de Toribio Dávalos (en Perú, el Alto
Perú o Salta), será muy valorado.
·
Desde Buenos Aires,
Liliana y Fabián (Agrupación Estirpe Surera) expresan:
“Gracias por posibilitarnos saber cada vez más de la vida
y obra de uno de nuestros héroes máximos”.
·
Desde
Buenos Aires, Martín Bernabó, saludó por el esfuerzo mensual en la
redacción del Boletín Güemesiano que con tanto afecto lee.
·
Desde
Australia, Ricardo Borowiec consultó sobre el acto realizado el 12 de
agosto en la Plaza Fuerza Aérea de Retiro en la cual se recordó el
abordaje de “la Justine” por mérito de Martín Miguel de Güemes.
VI.
AGENDA GUEMESIANA ABRIL DE 2011
En Abril de 2011 la
Prof. María C. Fernández desarrolló las siguientes actividades:
26 de Abril:
Invitada por el Ministerio de Cultura de la Ciudad de Buenos Aires,
asistió a la presentación del Libro “El Casco Histórico en la Escuela”
realizado en el Salón Dorado de la Casa de la Cultura, recibiendo un
ejemplar del mismo.
28 de Abril:
asistió a la reunión convocada por Casa de Salta con motivo de la
organización del acto en recordación del nuevo aniversario de la muerte
del Grl. Güemes
29 de Abril: Por
invitación del Programa de “Las Culturas” de la Provincia de San Luis,
asistió a la presentación de “La Colección del Bicentenario” realizada
en la Feria Internacional del Libro, recibiendo ejemplares de dicha
colección.
En la Feria del Libro
dialogó con el Arq. Luis Grenni, quien cita a la autora del Boletín como
fuente bibliográfica en publicaciones del Centro de Estudios e
Investigaciones Huacalera. El investigador obsequió la obra “Primera
Expedición al Alto Perú” de su autoría.
VII.
PALABRAS FINALES
En breve se cumplirá
un nuevo aniversario del paso a la inmortalidad del Grl. Güemes. Ciento
noventa años después de su partida mientras muchos lo recuerdan honrando
su memoria otros intentan mancillarla con bolitas de barro envueltas en
novedades literarias que rebotan y vuelven sobre quienes las amasan.
Parece incomodar que desde el pedestal el prócer siga guiando al pueblo
que otrora cabalgó con él rumbo a la gloria.
Por ello la carta que
en 1816 Martín Miguel de Güemes escribiera a Manuel Belgrano no pierde
vigencia, en vida ya le pasaba lo que hoy. En algunos párrafos decía: “Hace
Ud. muy bien de reírse de los doctores, sus vocinglerías se las lleva el
viento”. “Así pues trabajemos con empeño y tesón, que si las
generaciones presentes nos son ingratas, las futuras venerarán nuestra
memoria que es la única recompensa que deben esperar los patriotas
desinteresados”. “Dejemos a esta gavilla de ambiciosos que revolotean en
nuestra revolución, que si ellos logran algunas ventajas en sus
proyectos, la idea de sus crímenes y delitos, los tendrán siempre
agitados y llenos de descontento hasta que el Ser vengador que existe en
los Cielos acabe con esas existencias perversas”. Ya lo decía don
Martín: los de las vocinglerías obtenían ventajas, eran personas
instruidas, ambiciosas, pero nadie las recuerda ni homenajea. Similar
destino tendrán los que calumnian hoy.
Que un pueblo fecundo
mantenga una identidad en torno al héroe es –simplemente- insoportable,
por eso hay que oscurecerlo. Mientras, Güemes seguirá en su pedestal
haciéndonos sentir lo que Fernando García Bes:
¡Qué
estremecimiento que provoca
si merecido viva se
va a darte
pues deja sabor
patrio en la boca
Martín Güemes,
pronunciarte!
Por algo la Patria le
ha reservado el descanso en el recinto sagrado más emblemático de Salta
y uno de los más importantes de la República Argentina: el Panteón de
las Glorias del Norte. Estas páginas mantendrán en alto la antorcha que
un 8 de febrero celebró su vida y lleva once años encendida ¡por
siempre!
Prof.
María Cristina Fernández
Académica
Correspondiente
Instituto
Güemesiano de Salta
http://www.martinmiguelguemes.com.ar/